Doom aparte de una IP ahora propiedad de Microsoft, es una de las Ips más grandes del mundo de los videojuegos. Doom es una IP que ha trascendido de hecho los videojuegos: precursora de popularizar el género de los shotters, acusado de inducir violencia en los jovenes, con su propia adaptación cinematográfica… Y como no podía ser de otra forma, también con su propio de mesa. Bueno juego o juegos, porque hay más de 1, pero del que aquí vamos a hablar hoy es de Doom, el juego de tablero de 2016. El juego está basado en el reboot de la saga se hizo tras la compra de ID Software por parte de Bethesda, y eso lo notaremos también en las mecánicas.
Euro-Dungeon Crawler asimétrico.
Si sois expertos en juegos de mesa, igual podéis saltaros los 3 siguientes párrafos. Sino, tranquilos, no os preocupéis, que vamos a explicar rápidamente el galimatías de términos que he puesto en el encabezado de arriba. En términos generales los juegos de mesa se suelen dividir entre Eurogames y Ameritrash. Los primeros son aquellos en los que lo que importa son las mecánicas, el sistema de juego. Mientras que en los segundos la historia, la narratividad y la ambientación son lo que prima en la experencia de juego.
Uno podría pensar que un juego de mesa basado en una licencia siempre intenta hacer el máximo uso del universo en que se basa. Para nuestra desgracia la licencia de Doom está bastante desaprovechada aquí, únicamente en el apartado artístico se nota, pero casi nada en el desarrollo de las partidas. Por ello me vas a permitir que considere este juego más «Euro» que «Ameri».
Una vez establecido el aspecto más general, podemos decir que Doom, el juego de tablero, no inventa casi nada en lo que a mecánicas se refiere. Es un 100% un Dungeon Crawler, que viene a significar que deberemos movernos por unos escenarios cerrados a modo de cuevas, que que están divididos en habitaciones y estas a su vez en cuadrículas. Muchos juegos ya hacen uso de este sistema, como por ejemplo el juego de mesa de Gears of War del que ya os hablamos. La gran diferencia entre este y el juego de Gears of War, donde los Locust se controlaban solos, es que aquí los jugadores deberemos controlar ambos bandos. Tendremos hasta 4 marines en el bando de los «buenos» para hasta 4 respectivos jugadores, mientras que 1 jugador deberá llevar los Demonios. De ahí lo último que decíamos de juego «asimétrico».
El pequeño sello Doom
Como ya decía en la introducción, un detalle importante es que este juego de Doom no es el primero que ha salido, sino que es una revisión de 2016. Si seguís la saga sabréis que fue también 2016 cuando salió la primera entrega del reboot de Bethesda por lo que no es casual. Es por ello que tanto el estilo artístico como algunas mecánicas están totalmente basadas en la entrega de Bethesda. Sobre las mecánicas sacadas directamente del videojuego, lo más destacado son sin duda las ejecuciones.
Como ya comentaba Doom es un juego clásico de Dungeon Crawler, y como en la mayoría de estos, los combates serán con dados. Los enemigos irán acumulando daño y llegada a una cantidad concreta según cada tipo de enemigo podemos simplemente movernos a su casilla para ejecutarlos. Esta acción además hará que los enemigos nos suelten recompensas de un mazo específico. Por desgracia, poco más dota de auténtica personalidad propia al juego.
Arrasando con los marines por marte
El juego nos plantea diferentes misiones, cada una con su propio escenario, e incluso intenta que sigamos un órden a la hora de jugarlas. Por desgracia, la narratividad del juego es casi nula, con lo que no sentiremos que el órden de las misiones importe demasiado. Tampoco ayuda el hecho de que no haya progresión de personajes, ya que entre misión y misión nada de lo que conseguimos se conservará. Es por ello que Doom a pesar de su aspecto es más un entretenimiento ligero, e incluso puede servirnos para introducir a jugadores de cara a experiencias más complejas dentro de los Dungeon Crawler.
Aún así, la narratividad no es ni mucho menos el aspecto más negativo del juego. Como ya hemos comentado antes Doom es un juego asimétrico, pero por desgracia uno terriblemente hecho. A la hora de preparar las partidas, el jugador que lleva a los demonios, debe elegir sus unidades entre 3 de 6 opciones. Pues bien, el juego está tan desbalanceado a favor de los marines, que os recomendamos totalmente desplegar las 6 opciones que el juego nos plantea. Como dato curioso comentar que la versión original del juego de mesa de 2004, le pasaba totalmente lo contrario, siendo mucha más fácil para el jugador que llevaba los demonios.
Como conclusión personal por tanto, Doom, el juego de tablero, es un bastante normalito, bien en lo estético, pero muy mejorable en lo jugable y lo narrativo. Si aún así os interesa, por un poco más de lo cuesta un juego de Series (80€), podéis haceros con él, incluso si miráis en muevecubos podéis encontrarlo más barato. Para acabar os dejo un video cortito con un unboxing del juego. Hay muchos más videos de como jugar si investigáis, pero quería traeros uno más cortito para destacar sobre todo el potente aspecto visual del juego.
Acerca del autor
Con alma de Seguero no puedo evitar jugar a todo aquello que tenga zombies, supervivencia o ciencia ficción. Nunca salgo de casa sin mi toalla.